Una fauna y biodiversidad únicas que llenan el corazón.
Una fauna y biodiversidad únicas que llenan el corazón, en perfecta combinación con impresionantes paisajes, playas de arena blanca, una increíble selva tropical y una gastronomía deliciosa y llena de sabor. Todo esto y mucho más es lo que te espera si decides apostar por viajar a Madagascar. Sin duda, una experiencia única e irrepetible.
Y es que, en definitiva, entre lémures, ballenas y baobabs anda el juego… La vida malgache te sorprenderá y enamorará viajar a Madagascar. ¡De eso no cabe duda!
Fan del senderismo: podrás disfrutar de sesiones de este tipo en algunos de sus principales parques nacionales, donde entrarás en contacto directo con la naturaleza.
Especialista en destinos desconocidos: se trata de un destino menos conocido y, por tanto, poco visitado. Podrás decir adiós a las masificaciones y hola a disfrutar a tu ritmo y con estilo propio.
Amante de los paisajes y contrastes: saborearás el cambio de paisajes: terrazas de arroz, sabana, poblados, miles de baobabs..
Incapaz de decidir entre playa y montaña: Madagascar alberga una amplia gama de paisajes que incluyen sabanas volcánicas, cañones, colinas, cascadas, ríos, desiertos y bosques tropicales. Estos diversos escenarios se ven constantemente acariciados por los 5.000 kilómetros de costa que rodean la isla, gracias a la influencia del cálido y turquesa océano Índico.